Hacemos conexión con la historia de Ay Vidala e Isabel Briones,  en relación a la fotografía newborn, una rama de la fotografía profesional que busca captar en imágenes la belleza y ternura de los recién nacidos, en sus primeros días de vida. 

¿Cómo descubriste el mundo de la fotografía newborn?
Siempre me gustó la fotografía, cuando era chica ya me interesaba por este tema. Empecé por hobby, como una forma de expresión artística. Más tarde, hice fotos en cumpleaños infantiles y un día una mamá me preguntó si me dedicaba a la fotografía newborn. Investigué un poco y advertí que era una tendencia en el mundo que al día de hoy sigue en auge. Me quedé fascinada y comencé a capacitarme, no solamente en cursos de fotografía, sino también de seguridad para el bebé, con la finalidad de saber cómo tomarlo en brazos o acomodarlo para hacer determinada pose fotográfica, teniendo en cuenta que son muy frágiles.

 

¿Cuál es el momento ideal para hacer este tipo de sesiones?
Entre los 10 y 20 días de nacido es lo ideal, porque es la instancia en la que el bebé duerme más tiempo y se relaja con mayor facilidad. Puede pasar que no se duerma en toda la sesión, también. Las fotos salen igualmente bellas.  Cada bebé tiene su esencia, su frescura y lo que buscamos es poder transmitirla en cada imagen.

¿Cuánto tiempo llevan y qué preparación requieren?
Pueden llevar unas tres horas pero esto varía mucho de un niño a otro. Puede pasar que el bebé venga dormido y resulte sencillo hacer las fotos, o por el contrario que llegue despierto le cueste conciliar el sueño.
Hay ocasiones en las que esperamos aproximadamente una hora a que se duerma. No perdemos de vista que el recién nacido pide con frecuencia el cambio de pañales y ser alimentado. Cada niño tiene sus tiempos.
Son sesiones que requieren de una preparación especial. El estudio debe estar calefaccionado y todo organizado para el confort y tranquilidad del bebé y de los adultos que lo acompañen. Intento tener cada detalle previsto con anticipación porque durante la sesión hay que aprovechar el tiempo al máximo.

¿Se fijan pautas con los papás antes de la sesión?
Por lo general, cuando converso con los papás, ya conocen mi trabajo. Suelo enviarles información sobre las condiciones óptimas que se proponen para lograr los mejores resultados. También, les preguntamos sobre la rutina del bebé, en qué momento del día duerme más y mejor, les recomendamos que no lo traigan muy lleno o recién alimentado, entre otros consejitos que pueden resultarles de utilidad.

 

¿No es para cualquier fotógrafo este tipo de sesiones?
Tal cual, no es para cualquier fotógrafo. No se trata de agarrar la cámara nada más. Hay mucha preparación y aprendizaje detrás. El fotógrafo tiene que tener mucha paciencia y una personalidad especial. En lo personal, siento que el bebé percibe la energía que hay en el ambiente. Intento conectar desde la tranquilidad para que se relaje y todo fluya en armonía. Tenés que sentir un gran amor por tu trabajo para poder transmitirlo en cada sesión.

¿Hay ciertos trucos o atajos que se usan para que el bebé se relaje?
Hay ciertos recursos que podemos emplear, no son iguales para todos los bebés. Por lo general funciona muy bien el llamado “sonido blanco” similar al sonido del mar, o de un televisor cuando pierde conexión. Los bebés suelen quedarse profundamente dormidos. Hay otros bebés que se relajan con música clásica o que tiene sus preferencias musicales a la hora de descansar. Los papás me van guiando en ese sentido.
El chupete también es un gran aliado. La mayoría se duerme enseguida, pero no todos lo usan. Vamos probando. Cada pequeñito es diferente.

 

¿Es preciso elegir un concepto?
Los papás vienen muchas veces con la inspiración de algo que vieron en redes sociales como Pinterest y piden hacer algo similar. Trato de respetar lo que quieren los papás pero sin dejar de ser fiel a mi estilo y a lo que se puede hacer en la práctica porque algunas ideas pueden ser desopilantes o muy complicadas de realizar, incluso por la seguridad del bebé.
En el estudio pueden elegir accesorios, ositos, colores. Me encantan esas cosas, así es que tengo un montón de alternativas bonitas. Lo que siempre recalco es que es mejor la simpleza, el protagonista es el bebé y  si agregás muchos elemento,  puede que no se logre  que sea el bebé el que resalte y se luzca como debería.

¿Cuánto le lleva al recién nacido conciliar el sueño?
Varía mucho de uno a otro. Lo que se busca es que el bebé entre en un sueño profundo y eso puede llevarle una hora a un bebé y apenas unos minutos a otro.

 

¿Qué pasa si el bebé está molesto o incómodo?
Puede pasar que el pequeño esté incómodo, o se encuentre indispuesto por cólicos, fiebre o cualquier otra afección.  Si vemos que está muy molesto o que no es el momento oportuno, reprogramamos la sesión. Puede que solo quiera estar en los brazos de mamá y respetamos eso. No se puede estresar al bebé en el afán de hacer las fotos.

¿Cuántas personas pueden estar presentes en la sesión?
Se les pide a los papás que no inviten a otros familiares, como abuelos, tíos o padrinos, porque el bebé tiene que estar tranquilo y no ser perturbado por la presencia de tantas personas en la misma habitación. Lo ideal es hacer las fotos con la presencia de los padres solamente.

 

¿Qué pregunta te hacen de forma recurrente?
Lo que me preguntan de forma recurrente es si la sesión newborn puede hacerse al aire libre. Sobre todo cuando estamos en primavera y tienen un jardín con flores en casa. Les explico a los papás que no es lo aconsejable porque son muy chiquitos todavía. Lo mejor es hacer las fotos en el estudio, donde ya tenemos todo preparado y ambientado. Al aire libre podremos hacer fotos cuando el bebé cumpla seis meses.

¿Cuáles son los pilares de las sesiones newborn para tener óptimos resultados?
La clave está en estar pendiente de cada detalle, en cuanto a lo técnico, pero a la vez poniendo el foco en el trabajo artístico, teniendo muy claro lo que buscás transmitir a través de tus fotos. Y le agregaría como pilar fundamental el buen trato, la cordialidad y la capacidad de buscar el equilibrio y la calma en cada situación, entendiendo que estas son fotos soñadas y muy esperadas por los papás, lo que las hace especialmente únicas. 

 

 

Ay Vidala - Isabel Briones
@ayvidalafotografia •  Instagram